El objetivo de este estudio fue caracterizar la temperatura corporal y los cambios en la actividad de las cerdas de reemplazo al inicio del estro con el fin de proporcionar datos iniciales que permitan desarrollar un sistema de detección de celo a distancia.

Una detección precisa del celo de las cerdas puede mejorar los índices de concepción y aumentar la eficiencia de la producción porcina. Desafortunadamente, las prácticas actuales basadas en el comportamiento animal individual pueden ser ineficientes debido al gran número de cerdas existente en las actuales granjas comerciales y a la mano de obra asociada. Por lo tanto, el objetivo de este estudio fue caracterizar la temperatura corporal y los cambios en la actividad de las cerdas de reemplazo al inicio del estro con el fin de proporcionar datos iniciales que permitan desarrollar un sistema de detección de celo a distancia para las explotaciones porcinas comerciales. Para ello, con el fin de sincronizar los estros, se administró altrenogest a 12 cerdas de reemplazo (130,2 ± 1,9 kg de peso corporal) y se insertó un registrador de datos intravaginalmente para detectar la temperatura vaginal (TV) y cuantificar la actividad total durante las 24 horas del día a intervalos de 5 min durante los 7 días anteriores a la aparición esperada del estro. La actividad se cuantificó como recuento por minuto (cnt/min) utilizando un acelerómetro interno. Durante los 7 días de estudio, se determinó el estatus para estro dos veces al día (0800 y 1500 h) por parte de personal entrenado. Para estandarizar los datos, sólo se utilizó en el análisis final el día de la detección de celo (dE) y los días previos (d-3, d-2, d-1, n=4 días totales).

 

En general, la TV se redujo (0,26 ° C) el dE en comparación con los 3 d anteriores; sin embargo, no se detectaron diferencias entre d-3, d-2 y d-1. La actividad se incrementó (37,8%) el dE en comparación con d-3 y d-2, pero no se detectaron diferencias entre dE y d-1.

 

En resumen, la TV se redujo y la actividad aumentó al inicio del estro en las primerizas de reemplazo. Se concluye que los registradores de datos internos pueden determinar con precisión la temperatura y la actividad de las cerdas.

 

Jay S. Johnson, Kevin A. Shade